Existen 3 formas de presentación del cáncer de piel:
- Carcinoma basocelular: Es el más frecuente y se presenta, especialmente, en adultos mayores atacando las áreas de la piel más expuestas al sol: cara, cuero cabelludo, orejas, cuello y espalda. Es de lento crecimiento.
- Carcinoma espinocelular: Es el segundo más frecuente. Compromete las capas más superficiales de la piel. En etapas iniciales puede presentarse como placas rojizas, ásperas al tacto, que persisten en el tiempo y se hacen cada vez más rugosas, pudiendo llegar a formar grandes masas.
- Melanoma: Es el más peligroso por su desarrollo y las posibilidades de provocar metástasis a distancia. Se desarrolla a partir de un crecimiento descontrolado de las células productoras de pigmento o melanocitos. Por lo tanto, la mayoría de los melanomas son de color negro o café oscuro. Puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero en el hombre ocurre con más frecuencia en la espalda y en la mujer, en las piernas.
El tratamiento para esta enfermedad varía de acuerdo al tipo de cáncer, su tamaño y su localización; según la edad, sexo, y estado de salud del paciente; sin embargo la solución más común es la cirugía.
Recuerde que para prevenir el cáncer de piel es necesario: evitar la exposición solar entre las 09h00 y 16h00, usar estructuras que den sombra (quitasoles, techos), ropa adecuada y fotoprotectores o filtros solares 30 minutos antes de exponerse a al sol, con la piel limpia y seca.